quarta-feira, 13 de novembro de 2019

Las poetisas del amor... Dulce Maria Loynaz (Cuba)

Las Poetisas del Amor (03)




YO TE FUI DESNUNDANDO DE TI MISMO...


Yo te fui desnudando de ti mismo,
de los «tus» superpuestos que la vida
te había ceñido...

Te arranqué la corteza -entera y dura-
que se creía fruta, que tenía
la forma de la fruta.

Y ante el asombro vago de tus ojos
surgiste con tus ojos aún velados
de tinieblas y asombros...

Surgiste de ti mismo; de tu misma
sombra fecunda, intacto y desgarrado
en alma viva...






LA MUJER DE HUMO


Hombre que me besas,
hay humo en tus labios.
Hombre que me ciñes,
viento hay en tus brazos.


Cerraste el camino,
yo seguí de largo;
alzaste una torre,
yo seguí cantando...


Cavaste la tierra,
yo pasé despacio...
Levantaste un muro
¡Yo me fui volando!...


Tu tienes la flecha:
yo tengo el espacio;
tu mano es de acero
y mi pie es de raso...


Mano que sujeta,
pie que escapa blando...
¡Flecha que se tira!...
(El espacio es ancho...)


Soy lo que no queda
ni vuelve. Soy algo
que disuelto en todo
no está en ningún lado...


Me pierdo en lo oscuro,
me pierdo en lo claro,
en cada minuto
que pasa... En tus manos.


Humo que se crece,
humo fino y largo,
crecido y ya roto
sobre un cielo pálido...


Hombre que me besas,
tu beso es en vano...
Hombre que me cines:
¡Nada hay en tus brazos!





EL AMOR INDECISO


Un amor indeciso se ha acercado a mi puerta...
Y no pasa; y se queda frente a la puerta abierta.


Yo le digo al amor: -¿Que te trae a mi casa?
Y el amor no responde, no saluda, no pasa...

Es un amor pequeño que perdió su camino:
Venía ya la noche... Y con la noche vino.

¡Qué amor tan pequeñito para andar con la sombra!...
¿Qué palabra no dice, qué nombre no me nombra?...

¿Qué deja ir o espera? ¿Qué paisaje apretado
se le quedó en el fondo de los ojos cerrado?

Este amor nada dice... Este amor nada sabe:
Es del color del viento, de la huella que un ave


deja en el viento... -Amor semi-despierto, tienes
los ojos neblinosos aun de Lázaro... Vienes


de una sombra a otra sombra con los pasos trocados
de los ebrios, los locos... ¡Y los resucitados!


Extraño amor sin rumbo que me gana y me pierde,
que huele las naranjas y que las rosas muerde...,

Que todo lo confunde, lo deja... ¡Y no lo deja!
Que esconde estrellas nuevas en la ceniza vieja...

Y no sabe morir ni vivir: Y no sabe
que el mañana es tan sólo el hoy muerto... El cadáver

futuro de este hoy claro, de esta hora cierta...
Un amor indeciso se ha dormido a mi puerta...





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Leia também:

Las poetisas del amor (01)... Dulce María Loynaz (Cuba)

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