“Gostei de tudo e sofri. / Não tenho escolha senão me resignar a morrer. / Eu então criarei silenciosamente uma prole. / Quando um apetite maligno me empurrou / para os amores mortais, exaltei a vida. / Agora que também eu considero o amor como / garantia da espécie, olho para a morte”
ADIÓS
Con los ojos de la despedida
os vi aquel día,
cosas de nuestra vida.
Con los ojos de la despedida,
la vida parecía
una cosa perdida.
La casa estaba vacía
en la hora de la despedida,
y sin embargo quedaban
las cosas de nuestra vida.
DESTIERRO
Mi vida
es un destierro sin retorno.
No tuvo casa
mi errante infancia perdida,
no tiene tierra
mi destierro.
Mi vida navegó
en nave de nostalgia.
Viví a orillas del mar
mirando el horizonte:
hacia mi casa ignorada
pensaba zarpar un día,
y el presentido viaje
me dejó en otro puerto de partida.
¿Es el amor, acaso,
mi última rada?
Oh brazos que me hicieron prisionera,
sin darme abrigo...
También del cruel abrazo
quise escaparme.
Oh huyentes brazos,
que en vano buscaron mis manos...
Incesante fuga
y anhelo incesante
el amor no es puerto seguro.
Ya no hay tierra prometida
para mi esperanza.
La poeta que DICE TANTO EN TAN POCO |
La voz de una MUJER SUBVERSIVA en 4 POEMAS
EL CORAZÓN
Dicen que es del tamaño
de mi puño cerrado.
Pequeño, entonces,
pero basta
para poner en marcha
todo ésto.
Es un obrero
que trabaja bien
aunque anhele el descanso,
y es un prisionero
que espera vagamente
escaparse.
LOS PIES
Ya que no tengo alas,
me bastan
mis pies que danzan
y que no acaban
de recorrer el mundo.
Por praderas en flor
corrió mi pie ligero,
dejó su huella
en la húmeda arena,
buscó perdidos senderos,
holló las duras aceras
de las ciudades
y sube por escaleras
que no sabe a donde llegan.
MUJER
MUJER
LAS MANOS
EL CORAZÓN
Dicen que es del tamaño
de mi puño cerrado.
Pequeño, entonces,
pero basta
para poner en marcha
todo ésto.
Es un obrero
que trabaja bien
aunque anhele el descanso,
y es un prisionero
que espera vagamente
escaparse.
LOS PIES
Ya que no tengo alas,
me bastan
mis pies que danzan
y que no acaban
de recorrer el mundo.
Por praderas en flor
corrió mi pie ligero,
dejó su huella
en la húmeda arena,
buscó perdidos senderos,
holló las duras aceras
de las ciudades
y sube por escaleras
que no sabe a donde llegan.
MUJER
MUJER
LAS MANOS
Mis manos,
débiles, inciertas,
parecen
vanos objetos
para el brillo de los anillos,
sólo las llena
lo perdido,
se tienden al árbol
que no alcanzan,
pero me dan el agua
de la mañana,
y hasta el rosado
retoño de mis uñas
llega el latido.
ORACIÓN
Dame, señor
un silencio profundo
y un denso velo
sobre la mirada.
Así seré un mundo
cerrado:
una isla oscura;
cavaré en mí misma dolorosamente
como en tierra dura
Y cuando me haya desangrado
ágil y clara será mi vida
Entonces, como río sonoro y transparente,
fluirá libremente
el canto encarcelado.
¿QUIÉN ERES TÚ?
¿Quién eres tú, hijo tardío?
De los otros me parece
que algo sabía
desde el primer día
de duda y esperanza.
Pero tú, inesperado,
¿Quién eres?
en ti nunca había pensado.
¿Cómo vas a llegar
a este mundo enemigo
si ni siquiera yo te conozco?
Perdóname, hijo:
hasta me ha aprecido
que no había lugar para ti.
Mi corazón, ya lo verás,
es una sangrienta granada abierta.
Y yo estoy cansada.
Además,
tú me vas a quitar
ese retazo de mi vida
que me han dejado los otros:
casi nada,
pero me duele desprenderme
de lo último que me queda.
Tendrás que ayudarme a conocerte.
Y ha de ser tu vida,
tan vigorosa y fuerte,
que devore la mía, alegremente,
y yo lejana de mí misma
y distraída,
apenas lo lamente.
ELLA SE SIENTE
Ella se siente a veces
como cosa olvidada
en el rincón oscuro de la casa
como fruto devorado adentro
por pájaros rapaces,
como sombra sin rostro y sin peso.
Su presencia es apenas
vibración leve
en el aire inmóvil.
Siente que la traspasan las miradas
y que se vuelve niebla
entre los torpes brazos
que intentan circundarla.
Quisiera ser siquiera
una naranja jugosa
en la mano de un niño
-no corteza vacía-
una imagen que brilla en el espejo
-no sombra que se esfuma-
y una voz clara
-no pesado silencio-
alguna vez escuchada.
Perfil biográfico da poetisa e feminista guatemalteca Alaíde Foppa Falla, assassinada pela ditadura militar que governou a Guatemala durante grande parte do século XX.
Alaíde Foppa Falla “A Infeliz”
Viento de primavera.
débiles, inciertas,
parecen
vanos objetos
para el brillo de los anillos,
sólo las llena
lo perdido,
se tienden al árbol
que no alcanzan,
pero me dan el agua
de la mañana,
y hasta el rosado
retoño de mis uñas
llega el latido.
ORACIÓN
Dame, señor
un silencio profundo
y un denso velo
sobre la mirada.
Así seré un mundo
cerrado:
una isla oscura;
cavaré en mí misma dolorosamente
como en tierra dura
Y cuando me haya desangrado
ágil y clara será mi vida
Entonces, como río sonoro y transparente,
fluirá libremente
el canto encarcelado.
¿QUIÉN ERES TÚ?
¿Quién eres tú, hijo tardío?
De los otros me parece
que algo sabía
desde el primer día
de duda y esperanza.
Pero tú, inesperado,
¿Quién eres?
en ti nunca había pensado.
¿Cómo vas a llegar
a este mundo enemigo
si ni siquiera yo te conozco?
Perdóname, hijo:
hasta me ha aprecido
que no había lugar para ti.
Mi corazón, ya lo verás,
es una sangrienta granada abierta.
Y yo estoy cansada.
Además,
tú me vas a quitar
ese retazo de mi vida
que me han dejado los otros:
casi nada,
pero me duele desprenderme
de lo último que me queda.
Tendrás que ayudarme a conocerte.
Y ha de ser tu vida,
tan vigorosa y fuerte,
que devore la mía, alegremente,
y yo lejana de mí misma
y distraída,
apenas lo lamente.
ELLA SE SIENTE
Ella se siente a veces
como cosa olvidada
en el rincón oscuro de la casa
como fruto devorado adentro
por pájaros rapaces,
como sombra sin rostro y sin peso.
Su presencia es apenas
vibración leve
en el aire inmóvil.
Siente que la traspasan las miradas
y que se vuelve niebla
entre los torpes brazos
que intentan circundarla.
Quisiera ser siquiera
una naranja jugosa
en la mano de un niño
-no corteza vacía-
una imagen que brilla en el espejo
-no sombra que se esfuma-
y una voz clara
-no pesado silencio-
alguna vez escuchada.
Perfil biográfico da poetisa e feminista guatemalteca Alaíde Foppa Falla, assassinada pela ditadura militar que governou a Guatemala durante grande parte do século XX.
Alaíde Foppa Falla “A Infeliz”
Viento de primavera.
Antología poética (1945-1979) de Alaíde Foppa
________________
________________
Alaíde Foppa nasceu em 3 de dezembro de 1914 em Barcelona, com um destino tão brilhante quanto trágico. Morou alguns anos na Argentina e passou a adolescência na Itália, país de origem de seu pai. Ela também passou uma temporada na Guatemala, onde obteve a cidadania por meio do marido. Por razões políticas, ele teve que se exilar no México por um tempo. Lá trabalhou como professora na Faculdade de Filosofia e Letras, responsável pela cátedra de Literatura Italiana. Ela apoiou fervorosamente os movimentos feministas; Fundou a revista FEM e colaborou por diversos meios contra a repressão às mulheres. Na década de 70, ela refletiu a profunda tristeza pela morte dos filhos e do marido em uma série de poemas muito comoventes. Ao retornar do exílio em 1980, ela foi sequestrada e nunca mais foi vista.
O seu trabalho como poetisa talvez tenha começado na Itália, onde também completou os estudos universitários. Entre suas coleções de poemas mais notáveis estão "La sin Ventura", "Embora seja noite" e "Elogio do meu corpo". Destes últimos podemos apreciar “O Coração” e “As Mãos”. Aventurou-se também na crítica de arte, promovendo o trabalho de jovens artistas, e na tradução de poesia francesa e italiana.
Las mujeres nos lloramos y lloramos juntas porque cada vez que una es lastimada o desaparece nos arrancan un pedazo.
Nenhum comentário:
Postar um comentário